Es el sueño inconsciente, apasionado
que en las noches eternas me consuela
cuando el cuerpo descansa en duermevela
recreando tu recuerdo torturado.
Me parece sentir el roce alado
de tu sombra surgida como vela,
inflamada de viento en una estela,
consiente mi presencia a tu costado;
esos sueños de loca fantasía
cuando pienso tu pecho en mi regazo,
de tu mano la dulce melodía,
de tus labios, torrente delicado
que regala mil besos en la noche,
rompientes de distancia sin enfado.
Intenso, con la fuerza del deseo y la pasión! Uyy cómo están sus musas Sr. Tiguaz, impresionante!
ResponderEliminarUn abrazo con mi afecto!
Sandra, gracias por leerlo y por comentarlo.
ResponderEliminarMis Musas, como bien sabes, son algo traviesas, en ocasiones hasta descaradas, pero sin sus versos no podría vivir.
Muchas gracias por leerlo y comentarlo, un beso grande.