Foto Tiguaz. Sauce al margen del Sil
Soy el árbol que
guarda tu deseo
arropando con hojas
la sonrisa
en mis noches de sueños de Morfeo
el que suelta el
botón de tu camisa.
Es la Luna quien
mira sorprendida
de la rama se queda enamorada,
en el nido de
amor queda prendida
al principio y al fin ilusionada.
Voy perdiendo las
hojas lentamente
esperando el nacer
de primavera
de aquel río que
riega consecuente
raíces de verdor en
torrentera.
El viento me
acaricia lentamente,
es el Sol quien me guarda inconsecuente.
Eres el árbol, la frescura y el deseo. Eres fluir de estaciones y el vibrar continuo de tus anhelos.
ResponderEliminarPrecioso!! (el poema también... jjjj)
Un besito.
Muchas gracias Raquel por tú compañía, siéntete como en casa. Un abrazo.
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EliminarUn placer disfrutar de tu presencia y tu arte... Estoy como en casa, gracias!!!
EliminarOtro abrazo!!!
Me complace, saludos.
EliminarVoy perdiendo las hojas lentamente ....cobija me entre tus ramas.Precioso
ResponderEliminarTendremos que pactar hasta cuantas hojas puedes perder, luego hablamos. Sabes que se te guarda a buen recaudo. Bicos cálidos.
EliminarEse árbol que vence la desmemoria y roza con sus alas palabras.
ResponderEliminarUn abrazo de luz
En ocasiones, los recuerdos sobran, la memoria es funesta en otras hay que revivirla. Un abrazo.
EliminarMuy bello soneto TIGUAZ. Ese árbol que espera la primavera va sobreviviendo al clima con la esperanza puesta en la ayuda del río y el sol. Realmente somos como ese árbol necesitamos de la primavera para renacer después de cada invierno, a veces un mal amor son como un invierno crudo; nos arrasa.
ResponderEliminarmariarosa
Cierto, María Rosa, solamente somos árboles con un tiempo de vida tasado y con la fecha de caducidad impresa. Nacemos para morir, ese es nuestro destino. Gracias por leerme. Un abrazo y mi cariño.
EliminarLa luna siempre se asombra siempre es testigo junto al árbol que guarda mi secreto el misterio de un te quiero mientras el otoño aguarda, que soneto tan fantástico me encantó logras que suspire , precioso un beso desde mi brillo del mar
ResponderEliminarGracias Bea por leerme. Si yo te contara las conversaciones que tengo en las noches claras con la señorita Luna en su creciente mientras los dos contemplamos el sauce no te lo creerias. Algo escribiré un día sobre eso. Mi cariño desde esta mar.
ResponderEliminarUn soneto que rezuma magia y hasta me sabe a leyenda! Un hermoso poema que nos cuenta una historia, tierna y sutil. Mi aplauso, Maestro!! Me alegra saber que el frío no le acobarda las Musas. Un fuerte abrazo Tiguaz!
ResponderEliminarSandriña, mis Musas pasan calores eternos, tienen calores de amor que yo alimento y viven hacia el Sur del Parnaso. Gracias mil por tú compañía. Bicos.
EliminarPrecioso soneto Tiguaz, voy perdiendo las hojas ... que palabras tan hermosas, es envidiable la forma como escribes los sentimientos enroscados en estos versos.Arropando con hojas tu sonrisa.... ....ufff que bonito.
ResponderEliminarSiento envidia de ese árbol con el mantienes ese diálogo.
Besos Tiguaz.
Puri
Mi Dulce Dulcinea, vosotros, las y los queme leen son los que avivan esos sentimientos que de otra manera no podrían aflorar. Gracias, princesa. Mi cariño y agradecimiento.
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