La extraña sensación
de que no existe,
un quizás,
simplemente el mayordomo,
con todo lo que
antaño conseguiste
ahora me pregunto,
cuando, como.
El eco no contesta y
bien se calla
disfrazando va al
viento de silencio,
esa sombra de
aspecto del canalla
que a intervalos
supongo y evidencio.
Ve a la compra, los
niños al colegio,
y no tardes, después
haz la ensalada,
a la noche me harás
un sortilegio
que rime en
consonante con almohada.
Que triste es esta
vida que evidencio
vivir de esta manera
vale nada.
No es facíl vivir de esa manera, hace falta amor en la compañera que ayude a cambiar el aburrimiento del jubilado, que ayude a matizar con notas de picardía cada día.
ResponderEliminarmariarosa
Gracias Rosa, por la lectura y el comentario. Cuando vas a un parque y ves esa cantidad de personas que incluso conoces y sabes de su vida, te dan ganas de tomar otra salida solamente en pensar que en algún momento pueda pasarte. Desde tu otra casa mi cariño.
ResponderEliminarLa vida así contada por tu poesía esta llena de silencios marchitos, de horas cargadas de pesar, y de finales previstos
ResponderEliminartodos queremos llegar hasta donde ellos están, ya que de lo contrario es que la muerte nos libró de ese destino.
Una pregunta ¿ donde está echa la foto? me gusta el sitio.
Besos desde nuestro querido Vigo
Puri
Tiguaz , amigo, uuff doloroso pero alli vamos todos es mas llevadera cuando llevas algún amor al lado , pero te quedó magistral tus melodías como siempre son mágicas en este Soneto triste pero hermoso , me alegra volver a leerte besos desde mi brillo del mar
ResponderEliminarGracias Bea, un placer el verte por estos lares, Ees el camino que todos tenemos que andar, intentemos que sea lo menos doloroso posible. De mar a mar mi cariño.
EliminarPuri, muchas gracias por la lectura y el comentario; ciertamente todos queremos alcanzar ese destino, pero en ocasiones, se hace muy cuesta arriba. La foto es de la carretera en dirección a San Vicente do Mar, desde un observatorio de aves que hay en la carretera, la barca es una chalupa que está hundida y solo se la ve cuando está baja la marea. . Muchas gracias y desde este Vigo nuestro un abrazo.
ResponderEliminarLa vida por momentos se nos colorea de gris y mucho más cuando hay el manto de la monotonía a punto de cubrirnos y esas preguntas que a veces no tienen respuestas concretas: ¿cómo, cuándo? ... es una extraña sensación, sin embargo seguimos "viviendo" que rico ha sido volver a leerte. Te dejo mi abrazo lleno de luz.
ResponderEliminarMuchas gracias, Susana, el verdadero placer es mio al sentir tu mirada en mis letras. Desde Galicia Un beso.
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