Recordando tú maullar,
te diré gatito amigo
que siempre recordaré
tu mirar, dulce felino.
Echaré en falta el calor
de tu cuerpo junto el mío
tu dulce ronronear
y tus mimos, siempre mimos.
Fibi, amigo, hoy te vas
Pero que sepas, querido,
que nadie podrá ocupar
el dulce, dulce maullido
ni tú mirar al mirar
ni tus ojos en los míos.
En tu cielo morarás,
el cielo de los mininos
donde podrás retozar
por los siglos de los siglos.
Hermosa composición! Las mascotas, cuando se van nos dejan un vacío muy grande. Muy emotivo.
ResponderEliminarUn cordial saludo
Zeltia
Gracias por leerlo y comentarlo. Entra cuando quieras, estas en tu casa. Un abrazo
ResponderEliminar